Hola
Posted by Bebitacora On 27/07/2015
Cuando una llega a casa con ganas de ordenar, mejor aprovechar la tirada. Y es que esto no ocurre a menudo. Y cuando una llega a casa con ganas de ordenar y el compartidor de piso no está, entonces una sube el volumen, se pone una cerveza – bueno, espera un ratito que el vaso va al congelador – y ya. Qué esperabas.
Cada cosa tiene su sitio. A ti te toca colgado en una percha. Y a ti (a vosotros) en el congelador. Pero mejor de dos en dos para que no os aburrais. Cada cosa tiene su sitio. Vosotros a girar, girar, que luego ya saldréis a bailar al ritmo del ventilador del mundo. Y cuando salgáis me preguntaré «a dónde van a parar las parejas de los calcetines».
Y de repente suena With Or Without You y una se pone a bailar con el calcetín fresquito que huele a seda de Pekin o por ahí. Y corre y pone el transistor un poquito más alto. No de altura… de volumen, digo. Y ya que lo pone más alto, le da para atrás y vuelta a empezar. Un poquito más alto otra vez.
Y manda un mensaje, uno de esos con foto. «A ver si adivinais quiénes son», escribe. Do you wonder why I prefer to be alone? Have I really Lost Control? Es bueno decir que se quiere de vez en cuando.
And I feel like I knew you before le recuerda a anoche, cuando fue izada por las nubes por encima de las vallas de seguridad y los de atrás, lejos de enfadarse, se carcajearon por la falta de agilidad de una. Una dice «¡lo siento!» y se ríe. Se ha saltado la cola, ya está casi dentro. Cada cosa tiene su sitio.
Lo siento, dice el izador, por mi fallido intento de elevador al estilo bombero. ¡¿Lo siento tú?! ¡Lo siento yo! Y mejor practicamos para la próxima vez. Una sonrisa se escapa, otra, otra vez.
Wiiiiild Hooorssseeeesssss… Otros recuerdos, sin mensaje esta vez. Ni que se gastaran… No hay mensaje, pero hay memorando, del lat. memorandum, cosa que debe recordarse.
Y cuando una empieza a teclear en su mente y se acuerda de Cuaderno Bebitacora, mejor aprovechar la tirada.
Cada cosa tiene su sitio.
All the dreams we held so close
Seemed to all go up in smoke
Let me whisper in your ear
Angie, Angie…
Qué cosas
Posted by Bebitacora On 09/06/2013
Un día vi mosquitos sobre una cabeza.
La cabeza avanzaba y se paraba y los mosquitos avanzaban y se paraban. A su alrededor había más cabezas. Unas más altas, otras más bajas. Algunas de las cabezas más bajitas avanzaban más rápido y desandaban lo andado para volver a avanzar más rápido. Iban y venían, iban y venían. Sólo la cabeza que un día vi tenía mosquitos. Qué cosas…
Yo caminaba a mi ritmo y la cabeza y los mosquitos y las demás cabezas me adelantaban; las cabezas más bajitas me adelantaban a mi y a la cabeza alta y a los mosquitos; varias veces. La cabeza bajo los mosquitos hablaba con las demás cabezas, pero los mosquitos no volaban de una a otra. Entonces yo les adelantaba a todos, a las cabezas altas, a las bajitas y a los mosquitos. Pero ni siquiera cuando yo les adelantaba venían conmigo. Se quedaban pacientemente volando esperando a que su cabeza volviera a avanzar. Los mosquitos, digo…
Debía ser una relación interesada. O desinteresada, quién sabe. De esas que aprendimos en las clases de naturales cuando dábamos naturales. Los peces que viajan sobre otros peces y les limpian a cambio de que los peces grandes les lleven. Esta es una relación interesada de mutuo acuerdo; tiene un nombre la relación pero no me acuerdo. En cambio me acuerdo de las clases de naturales y del libro verde con círculos de colores.
No veo qué interés pueden tener unos mosquitos en volar sobre una cabeza, ni la cabeza en tener una aureola de mosquitos.
Ha pasado mucho desde entonces. Un año. Cuatro estaciones enteras, tres de ellas invierno.
He vivido en cinco casas contando el hostal. He ido en bici, en autobús, en tren, en barco, en avión y en coches sin volante. He andado y he perdido autobuses porque no puedo correr. Pero luego han llegado más autobuses.
He estudiado y he dicho que estudiaba pero no estudiaba. He hecho cursos en los que no había profesor y cuando había llegaba a las once. Y cuando venía tres días seguidos se cambiaba la corbata pero no se cambiaba el resto. Al menos siempre iba a juego.
He tomado tés de dos unidades monetarias (en adelante u.m.) y cervezas de cuatro u.m. He comido en casa porque fuera piden demasiadas u.m. He escuchado música y he intentado cantarla.
He hablado horas por teléfono porque entre nosotros es gratis. He enviado infinitos mensajes porque son ilimitados. He guardado correos electrónicos porque un día los releeré y me reiré – o lloraré.
He salido poco porque estoy muy a gusto en casa. He salido lo suficiente.
He leído y he escrito. No he visto la tele porque no tengo. He visto series en versión original y con subtítulos. He escrito y he leído y he vuelto a escribir hasta dar por bueno lo escrito.
Nunca me regales un reloj o un ebook o una tele.
He ido al gimnasio pero luego no porque hacía frío. Así que he engordado y ahora estoy a dieta. Ah, no, que siempre estoy a dieta. Me he comido una galleta porque me la he ganado.
He hecho planes y no los he cumplido. He hecho cosas que no he planeado. He deseado cosas y han ocurrido. O no. Así que he sido feliz. Y no.
He querido un poquito y he dejado de querer. Creo. Me han querido y me han dejado de querer. Supongo.
Hace mucho viento. Me gusta más la lluvia que el viento. Me gusta el cuadro que vi a través de un cristal lloviendo. Me gustó el pastel que vendían junto al cuadro a través del cristal lloviendo.
He cumplido un año, más. Eso es bueno porque lo contrario es malo. Esto lo han dicho en la radio. Es malo a pesar de que no te enteras. Espero. Esto lo digo yo.
He escuchado la radio. He ido al cine pero no al teatro. He ido a sótanos y había cómicos. A algunos les entendía, incluso. El cine es caro.
Ha pasado un año y hasta he encontrado trabajo.
Cambiar de profesión
Posted by Bebitacora On 21/05/2013
Me pasan tantas cosas raras que me estoy planteando escribir un libro de anécdotas. Eso, o cambiar de profesión. Esta es la más reciente…
Conversación telefónica traducida del inglés con alguien que me llamó ayer por la mañana:
– Eva: ¿Hola?
– Alguien: Hola. ¿Quién eres?
– E: Soy Eva, me acabas de llamar tú.
– A: ¿Eres la limpiadora?
– E: ¡No! ¡Soy la contable!
– A: ¡Ah! ¿Cuánto cobras por sexo?
– E: ¿Perdón? ¿Puede repetir?
– A: Por SEXO. ¡SEXO, SEXO! ¡Cuánto cobras por SEXO!
– E: ¿Qué? Perdón pero creo que está llamando a la persona equivocada.
– A: No, eres tú, reconozco tu voz.
– E: Bueno, ¿quién eres? (A estas alturas pensaba que era algún amigo tomándome el pelo…).
– A: Ya sabes quién soy, hablamos en enero. Te envié mi polla -admitido por la RAE, así que ahí ha ido-.
– E: Perdona no sé quién eres.
– A: Vale, vale, adiós (cabreado…).
– E: Adiós (impactada…).
Juro que el anuncio de trabajo que publiqué era sobre contabilidad. Quizá necesite revisar mi inglés porque igual estoy ofreciendo
algo totalmente diferente sin saberlo :-/
Hasta la próxima anécdota :-)
Qué timo
Posted by Bebitacora On 18/03/2013
Hace pocas semanas estábamos en la playa pensando que el invierno se retiraba tímidamente y la primavera comenzaba a abrirse paso asomando la nariz entre las gélidas tinieblas invernales. Incrédula de mi, qué timo oye…
Brighton Pier |
No es una nueva moda ni la foto es de los años 20 en que los bañadores iban del tobillo al cuello y viceversa. Ir a la playa aquí no implica sombrilla, toalla y bronceador. Pero qué agradable el sol, aunque a diez grados.
¿Retirarme yo? Ni hablar, dijo el invierno. Y la semana pasada, después de aquel día de tregua:
Palmeira Square, Brighton |
Preston Park, Brighton |
Menos mal que algunos sabemos sacar provecho sea cual sea la situación…
Berlín holocáustica
Posted by Bebitacora On 23/02/2013
Berlín arquitectónica
Posted by Bebitacora On 30/01/2013
Siempre he querido ir a Berlín y allá que me he ido recientemente a pasar tres días. Tres días que saben a poco para tal ciudad, pero bien merecen la pena.
Se quedaron muchas cosas en el tintero. Elegir qué ver por un lado y descartar por el otro es ardua tarea. Y aunque llegué con la idea de trasladarme en autobús por la ciudad, la accesibilidad y cercanía al metro hizo que viajara bajo tierra como los topos y que perdiera la oportunidad de descubrir rincones, sin duda, dignos de visitar.
Ésta es mi Berlín arquitectónica…
Gendarmenmarkt
Gendarmentmarkt -mercado de los gendarmes- es una armoniosa y bella plaza flanqueada por la Französischer Dom -una catedral francesa-, la Deutscher Dom -una catedral alemana- y Konzerthaus (Schauspielhaus) -un auditorio-. Esta plaza fue originalmente planeada como un mercado y su nombre actal conmemora el regimiento de coraceros Gens d’Armes, cuyas caballerizas permanecieron en la plaza hasta 1773. El actual auditorio se erige en el lugar en el que inicialmente se alzaba un teatro francés, destruido por el fuego en 1817.
Para aquel que busque tabernas típicas en las que tomar una cerveza y comer algo, justo detrás descubrí Augustiner am Gendarmenmarkt.
De hecho fue la única taberna típica que encontré en todo el viaje y esta es la pena que me ha quedado pues estoy segura de que debe estar plagado de ellas. En cualquier caso, es un lugar autóctono, acogedor y la comida no está mal.
Museuminsel
La Museuminsel -isla de los museos- es un conjunto artístico formado por cinco prestigiosos museos y pertenece al Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Yo sólo anduve por los alrededores, me apetecía más plan callejeo e historia holocáustica y de la Alemania dividida. Pero si te interesa el arte sin duda es un buen lugar por el que comenzar. ¡Aunque Berlín está salpicada de museos por todas partes!
Brandenburger Tor
La Brandenburger Tor -puerta de Brandemburgo- simbolizó en un pasado no muy lejano la separación entre Alemania oriental y occidental. En cambio, desde la caída del muro el 9 de noviembre de 1989, representa la unidad del país.
Fue construida entre 1788 y 1791 como puerta de acceso al «Nuevo Berlín» de la época. Durante la Segunda Guerra Mundial sufrió graves daños; fue reconstruida a lo largo de 1957. En 1961, con la construcción del muro de Berlín quedó sin acceso en general, con la excepción de guardias de frontera e invitados especiales, como la familia real.
Denkmal für die ermordeten Juden Europas
El Denkmal für die ermordeten Juden Europas -monumento a los judíos asesinados en Europa- se encuentra a escasos metros de Brandenburger Tor y consiste en una superficie de 19.000 metros cuadrados cubierta con 2.711 losas de hormigón de distintas alturas. Se puede transitar entre ellas y, al tratarse de una superficie de terreno inclinada, puedes encontrarte con losas a la altura de tus rodillas o literalmente sumergirte entre ellas.
El que fuera de noche cuando lo visité, que el tiempo estuviera helado, que la zona estuviera desierta, lo que representa el monumento, la historia vibrante de Berlín palpable desde cualquier rincón… el conjunto de todo esto supongo que fue lo que hizo que sintiera impresión, desolación, angustia, ¡miedo quizá! Una mezcolanza de sentimientos difícil de describir. Lo que recuerdo es que sólo quería salir de allí.
Y lejos de que esto haga que no me guste lo que vi, lo que consigue es que lo admire más. Creo que es de lo que se trata con el arte: de hacer aflorar sentimientos. Positivos o negativos, pero sentimientos a flor de piel. Soy crítica con el arte moderno, aquel absurdo a mi modo de ver que no requiere de la elaboración exquisita, exclusiva sólo a unos pocos talentosos. Aquel arte que podemos hacer cualquier con un par de copas de más no me trasmite nada.
Aquel día estuve visitando el campo de concentración de Sachsenhausen. Supongo que la experiencia, que contaré estos días, influyó también en cómo me sentí.
De cómo las redes sociales pueden ser útiles
Posted by Bebitacora On 18/10/2012
Alguna que otra vez he tenido la conversación acerca de la utilidad de las redes sociales. Privacidad vs. Deslegitimación de derechos, Extroversión vs. Introversión, Pérdida de vida social vs. Enriquecimiento de relaciones lejanas. Por poner unos ejemplos. Pero este es un debate aparte. Hoy quiero hablar de cómo las redes sociales pueden ser útiles.
Lo bueno de tener Facebook es que puedes agregar amigos. A los que te dé la gana. Quien dice amigos, dice lugares, colectivos, locales de interés.
Y algo bueno de tener Spotify es que puedes conectarlo con Facebook.
Hace unos días hablaba de The bee’s mouth. Como ya decía es un pub en Brighton en el que todos los días, todas las semanas, hay un evento. Música en vivo, proyección de películas subtituladas, sesiones Open-Mic -esto es: vas, coges el micro y cantas, cuentas un chiste o tocas las maracas, lo que te dé la gana; es tu oportunidad de mostrar un talento ante un público-, y más cositas.
Con el fin de saber qué eventos hay cada semana, me hice amiga de The bee’s mouth en Facebook y ahora no sólo sé qué se cuece allí día a día, sino que dispongo de la música que reproducen desde que abren hasta que cierran.
¿Que qué es lo bueno de esto? Básicamente que descubro música nueva.
Hoy he descubierto a Foals, una banda de Oxford, Inglaterra, que suena así.
Un Sahara totalmente español…
Bath…
Posted by Bebitacora On 12/09/2012
Bath es una ciudad en el condado de Somerset situada al suroeste de Inglaterra. Fue nombrada Patrimonio de la Humanidad en 1987. Es un must see -visita obligada- y es considerada como la ciudad más bonita por una inmensa mayoría.
Además de por su belleza, es conocida por sus termas romanas. Según la Wikipedia estas fueron antes que la ciudad, siendo Bath fundada por los romanos como un complejo termal en el año 43 d.C.
Culturalmente cuenta con cinco teatros, diversos festivales -de música, cine, literatura y, cómo no, de cerveza-, una competición artística anual, una galería de arte y varios museos. Además, en diciembre de 1775 vió nacer a una de las más reconocidas autoras inglesas, Jane Austen. Aquí me detengo un rato. Como su más famosa residente, Bath homenajea de manera permanente a la escritora con un centro cuya exhibición narra la historia de cómo vivir en Bath influyó en la vida y obra de Austen. Anualmente se celebra además un festival en su honor -que, por cierto, este año tiene lugar este fin de semana, entre el 14 y el 22 de septiembre-.
Fue Bath además cuna de Thomas Gainsborough, pintor de retratos y paisajes; Thomas Lawrence, pintor de retratos y presidente de la Real Academia; John Maggs, pintor; William Friese-Greene, fotógrafo e inventor prolífico. Cinematrográficamente, Bath ha sido escenario de varias películas -Vanity Fair (2004), The Duchess (2008), The Elusive Pimpernel (1950) y The Titfield Thunderbolt (1953)- y progamas de televisión.
Sinceramente, creo que Bath cuenta con material suficiente como para escribir una trilogía y no tan sólo una entrada de humilde blog.
Como experiencia personal y a modo de resúmen, lo siguiente.
Fuí con un grupo de compañeras de academia en un viaje organizado. En el bus nos dieron este mapa en el cual están marcados los ocho puntos más importantes de la ciudad y su ubicación. Al llegar, los guías nos condujeron por el recorrido…
1. Bath Abbey
2. Roman Baths
3. Thermae Bath Spa
4. Victoria Art Gallery
5. Jane Austen Centre
6. The Circus
7. Assembly Rooms & Fashion Museum
8. Royal Crescent
… en 20 minutos. Os lo recomiendo. Ver una ciudad con tanto por ver en 20 minutos. Luego nos dejaron un hora para visitar libremente. Qué generosidad.
Por si dudáis, lo de los lados de la foto no son pisapapeles. Son la botella de vino que me estoy tomando y la copa en la que lo tomo. Todo esto mientras escucho Kings of Convenience.
Y finalmente, como anécdota contar que en 1696, a raiz de una caída de la economía, William III creó un impuesto por el que cada casa que tuviera más de seis ventanas debía apoquinar pasta. Como consecuencia, muchas de las casas con exceso de ventanas -seguramente las de la oposición- decidieron tabicarlas. De esta manera, una casa con 7-9 ventanas debía pagar 2 chelines y una casa con 10-19 ventanas debía pagar 4 chelines. Espero que esto no lo lea nuestro querido gobernador, no quisiera alimentar su abanico de medidas necesarias…